Una pasión impensada
En el año 2008, un viaje turístico familiar por San Rafael marcó el inicio de nuestro emprendimiento. Alojarnos en cabañas, rodeados de plena naturaleza mendocina, nos despertó un interés que se convertiría en pasión. Tres años más tarde, el sueño de adquirir una finca se hacía realidad, llevándonos por un sendero pleno de aprendizaje y nuevas vivencias. Siempre en familia y acompañados por expertos en cultivo y tecnología...